Y que importa si somos diferentes, si vamos en dirección contraria a la vida o si entendemos la felicidad de otra manera.
Si con insultos expresamos el deseo, o con malas miradas las ganas de tenernos o disimular que no nos importamos una mierda, y cada vez que cerramos los ojos pensar en un nosotros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario